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www.negociosnow.com Febrero 2020 11 NegociosNow NegociosNow Foto cortesía La donación de zapatos a niños de la comunidad es algo que Camen disfruta y hace cada año. Foto Gerardo Durán Carmen Solano muestra con orgullo en su restaurante sus donaciones que realiza a la comunidad a la cual agradece su éxito como empresaria. truido una suerte de familia que es clave a la hora de lidiar con tantos restaurantes a la vez. "Tengo mucha gente que han crecido conmigo, empe- zando desde abajo. Cuando les veo potencial, los mando a clases. McDonald's tiene uno los mejores cursos de negocio del mundo. Yo quería estar en televisión, no sabía nada de negocios, aprendí aquí." Secretos de una emprendedora Carmen también compar- tió con Negocios Now algu- nos consejos que daría a otras empresarias que bregan con un sinnúmero de retos. "Como latinas y mujer, tenemos mucho que apor- tar en una empresa. Somos mamá y 'corremos' el negocio de la casa, las que vamos al supermercado con un pre- supuesto que gastar, las que generalmente hacemos las citas médica de los mucha- chos, ayudamos con tarea. Es decir, sabemos planear y eso hace las cosas un poco más fácil", opina. Y continua: "Lo otro es que como latinas protegemos a nuestros hijos, queremos que estén con nosotros en casa, creemos mucho en la vida familiar, y llevamos esas ideas a los negocios y hacemos una familia. Es lo que yo he hecho y creo que por eso me ha ido muy bien". Carmen asegura que como Latinos "debemos trabajar 20 veces más duro que cualquier otra persona, por el color de nuestra piel, porque habla- mos otro idioma, por lo que sea no se nos hace tan fácil, pero con todo, salimos ade- lante". ¿Cuál es el límite de Carmen Solano, a dónde quieres llegar Carmen Solano?, preguntamos. "Es algo que siempre me pre- guntan. No sé, porque cuando empecé no pensaba que iba a tener 15 restaurantes. Pero soy de esas personas que piensan que, si hay una oportunidad, hay que tomarla. Nunca puede encerrarse en la idea de que yo nada más puedo hacer esto, y no aquello; y pone un par de ejemplos. Dirige tres restaurantes en Chicago downtown y uno en Humboldt Park que fue rechazado por dueños lati- nos porque está en una zona de pandillas, no era un lugar bueno. "Yo me metí ahí, y hasta hoy no tengo ni un grafiti; y cuando los pandilleros vie- nen, los trato como otro ser humano, me quieren muchí- simo y hasta me protegen mi McDonald's. Yo asumí el ries- go y es hoy una de mis tiendas más ocupadas en ventas". Nunca olvides de dónde viene El alma caritativa de Car- men es tan inmensa como la mujer empresaria que es. Cada año la dominicana dona a la comunidad cientos de miles de dólares en artícu- los como zapatos, mochilas y bicicletas. También otorga becas. Y Carmen expresa emo- ción cuando habla de lo que ella y su esposo hacen por su comunidad porque nun- ca debemos olvidar -dice- de dónde uno viene. "La comunidad latina nece- sita mucha ayuda y yo quisie- ra hacer más. Tengo una niña con necesidades especiales, tiene autismo, y mi esposo y yo tenemos una beca que damos en nombre de ella a mis empleados o a sus hijos", asegura. Su caridad es proverbial. En el verano dona bicicletas que se rifan para niños. Al comienzo de las clases en septiembre, regala mochilas. "Donamos 500 mochilas por tiendas ubicadas en comuni- dades que son principalmen- te latinas", explica. Carmen también es par- ticularmente famosa por sus "C omo latinas y mujer, tenemos mucho que aportar en una empresa. Somos mamá y 'corremos' el negocio de la casa, las que vamos al supermercado con un presupuesto que gastar, las que generalmente hacemos las citas médica de los muchachos, ayudamos con tarea. Es decir, sabemos planear y eso hace las cosas un poco más fácil" donaciones de zapatos que inició hace cuatro años. Pri- mero lo hizo con una empre- sa que luego decidió salir y ella continuó con la iniciati- va porque -dijo- hay mucha necesidad de tenis para gim- nasio, especialmente en niños latinos.. En esta misión perso- nal, Carmen busca apoyo de organizaciones comunitarias como Casa Central, de la que forma parte de su Junta Direc- tiva, y de Erie Neighborhood House, que una vez dirigió su esposo, así como otras escue- las en vecindarios hispanos como Back of the Yard. "Compramos mil pares de zapatos de marcas como Nike, Puma y Adidas y los mucha- chos se vuelven como locos", dice con satisfacción. Pasa- mos un día con un camión lleno de zapatos. Eso me llena el corazón. A veces yo misma se los pongo a los muchachos. Probablemente esta es mi actividad preferida", afirma. Pocas cosas hacen feliz a esta mujer que de niña soñó con ser una artista famosa que interactuar con su comu- nidad y poder ayudarla. "Creo que es una respon- sabilidad de todos los due- ños de negocio devolver a la comunidad lo que ha hecho por ti. Yo no estaría aquí sin su apoyo. Me aceptan, me quieren mucho, me abrazan cuando yo vengo, y es una manera de devolverle a ellos ese amor con algo que yo puedo hacer y lo hago con mucho gusto". (NN) (Por Cle- mente Nicado, Publisher & Editor Jefe) NegociosNow NegociosNow Latinas in business

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