El Nacional de Oklahoma

January 7th, 2021

Esta es la edición semanal de el periódico El Nacional de Oklahoma. Subscríbete y obtenla sin costo alguno

Issue link: https://www.ifoldsflip.com/i/1326103

Contents of this Issue

Navigation

Page 1 of 31

DISEÑO GRÁFICO VICTOR ACOSTA FABIAN LAGUNES REPRESENTANTES DE VENTAS VICTOR VILLAR PERRY KEPFORD ASISTENTE DE PRODUCCIÓN GIOVANNI CORONA DISTRIBUCIÓN TONY PALLET P r o u d M e M b e r s a n d P a r t n e r s o f : ADS E-MAIL ads@elnacionalmedia.com NEWS E-MAIL noticias@elnacionalmedia.com GENERAL E-MAIL info@elnacionalmedia.com 2328 S Harvey Ave., Oklahoma City, OK 73109 The opinions expressed in articles published are not necessarily those of El Nacional. SUBSCRIPTIONS $96/Year Oscar Quiroga FINANZAS COLUMNISTAS ESPECIALES RANDY QUIROGA-KING PUBLISHER CONTACT US: w w w. e l n a c i o n a l d e o k l a h o m a . c o m 405.632.4531 OKLAHOMA OWNED. HISPANIC OWNED. Carmen Romo SALUD I N G O D W E T R U S T E N D I O S C O N F I A M O S El Nacional Pastor Alberto Mottessi IGLESIAS EDITORA EJECUTIVA ROSA QUIROGA-KING EDITOR JOSUÉ RAMOS CORRESPONSAL LYDIA GONZALEZ-D'ROSS OKLAHOMA'S #1 HISPANIC News pa per and Website Attorney Guide Medical Guide Metro Magazine! FOUNDED - 1988 A2 | EL NACIONAL DE OKLAHOMA JUEVES 7 DE ENERO, 2021 WWW.ELNACIONALDEOKLAHOMA.COM www.facebook.com/elnacionaldeok DISEÑO GRAFICO FABIAN LAGUNES FABIAN LAGUNES DISEÑO GRAFICO FABIAN LAGUNES PERRY KEPFORD VICTOR VILLAR DISEÑO GRAFICO FABIAN LAGUNES PERRY KEPFORD VICTOR VILLAR PERRY KEPFORD VICTOR VILLAR DISEÑO GRAFICO FABIAN LAGUNES PERRY KEPFORD VICTOR VILLAR NACIÓN Una vez más, el Kremlin ha utilizado su arma favorita en un esfuerzo por silenciar a un opositor. Es la marca de un régimen que es tan paranoico que no está dispuesto a tolerar ninguna crítica o disidencia. Creo que Rusia es un oponente, de verdad lo creo". Ø Joe Biden, presidente electo de EE.UU. TENSA. Joe Biden y Vladimir Putin en un momento de distensión. SERÁ CONFLICTIVA CÓMO Y POR QUÉ CRECERÁ LA RIVALIDAD ENTRE ESTADOS UNIDOS Y RUSIA CON EL CAMBIO DE MANDO EN WASHINGTON BEN GERSHOW PAISANOS Joe Biden recorrió con la vista el despacho de Vladimir Putin en el Kremlin y sonrió. "Es increíble lo que puede hacer el capitalismo, ¿no? ¡Qué mag- nífica oficina!", le dijo a quien en ese momento era primer ministro de Rusia, que res- pondió riendo. Era marzo de 2011 y la visita del vicepresidente a Moscú se enmarcaba en uno de los tan- tos experimentos fallidos de la política exterior del gobierno de Barack Obama: el "reseteo" de relaciones con Rusia. Putin le había delegado formalmen- te la presidencia a Dmitry Medvedev en 2008 —para cumplir con la Constitución que reformaría en 2020 para no tener que volver a tomar- se la molestia—, pero seguía siendo el jefe de Estado de hecho. Biden, quizás no muy convencido de las probabili- dades de éxito de la estrategia de Obama hacia Rusia, se acer- có entonces a Putin y le dijo: "Primer Ministro, lo estoy mirando a los ojos y... no creo que tenga alma". Lejos de ofen- derse, el ex KGB se entusiasmó con la franqueza de su inter- locutor. "Nos entendemos el uno al otro", le contestó con picardía. La anécdota la contó Evan Osnos, biógrafo del pre- sidente electo de los Estados Unidos, en un artículo publi- cado en 2014 en The New Yorker. La alusión al alma de Putin era una referencia a lo que George W. Bush había dicho diez años antes, luego de su primer encuentro bilateral con el mandatario ruso. "Miré al hombre a los ojos. Me pare- ció muy directo y confiable y tuvimos un muy buen diálogo. Fui capaz de sentir su alma". Este no parece ser un concepto más para Biden. El eslogan con el que ganó las elecciones fue, precisamente: "Una batalla por el alma de intervenciones en Ucrania, con la anexión de la península de Crimea, y en Siria, donde dio un apoyo decisivo a Bashar al-Assad. Por ambas decisio- nes el Congreso estadouni- dense aprobó sanciones que golpearon a la economía rusa. Un eventual triunfo de Hillary Clinton en 2016 solo podía significar una profundi- zación de la presión por parte de la Casa Blanca. En cambio, Trump se insinuaba como un presidente mucho más amiga- ble. Por su desinterés hacia la política exterior, difícilmente iba a preocuparse por lo que hiciera Rusia en Europa del Este o en Medio Oriente. Y estaba claro que su estilo poco apegado a las normas y convenciones políticas iba a incrementar la polarización interna en Estados Unidos, limitando su capacidad para influir eficazmente en el mun- do. Por eso, Rusia no se limitó a esperar que Trump hiciera lo que parecía imposible y ganara las elecciones. Trabajó para ello. La investigación del fiscal especial Robert Mueller sobre la injerencia rusa en el proceso electoral probó con abundantes evidencias que Moscú intervino activamen- te para perjudicar la candida- tura de Clinton y promover la de Trump. Primero, hackeando y divulgando correos electró- nicos de líderes demócratas, para exponer las internas del partido. Segundo, finan- ciando una enérgica campa- ña publicitaria en las redes sociales, con miles de per- files falsos que llamaban a votar por Trump, atacaban a Clinton y alentaban la abs- tención entre minorías afines al Partido Demócrata. Mueller investigó los múl- tiples contactos de miembros del círculo de Trump con Rusia, y de hecho imputó a varios de ellos por diversos delitos económicos en causas derivadas de la original. a n d E n t re p re n e u rs h i p ("Promoción de la política exterior y emprendeduris- mo"), entre otros libros. DE LA AMISTAD CON TRUMP A LAS CRÍTICAS DE BIDEN La elección de Donald Trump como presidente de Estados Unidos en noviem- bre de 2016 fue celebrada con aplausos en el recinto de la Duma Estatal, cámara baja del parlamento ruso. Tras darse cuenta del fracaso de su polí- tica de aproximación hacia Rusia, el gobierno de Obama adoptó una postura adversa- tiva frente al Kremlin. Especialmente a partir de 2014, luego de que Putin empezara a practicar una política exterior mucho más agresiva, como se vio con sus la nación". La idea que asoma por detrás es que la presiden- cia de Donald Trump puso en cuestión cuáles son los valo- res centrales, el espíritu, de los Estados Unidos. Y es en la pre- tendida búsqueda de defender algunos de esos principios, como la promoción de la democracia y —sobre todo— la solidaridad con los aliados históricos, que Biden termi- nará chocando con Putin. Es cierto, hay razones estructurales, geopolíticas, que son más importantes para entender la matriz del enfrentamiento entre Estados Unidos y Rusia. Es lo que explica por qué el conflicto se mantuvo durante el gobier- no de Trump, que tan buena sintonía tuvo con Putin. Pero, a diferencia de Trump, Biden se encolumna en la larga lis- ta de líderes estadouniden- ses que ven a su país como el principal sostén del vapulea- do orden liberal global, que el Kremlin ha intentado debilitar por considerarlo una amenaza a su modelo de gobierno y a su influencia internacional. Es en ese punto donde parece inexo- rable una mayor tensión entre Washington y Moscú a partir del 20 de enero. "La toma de posesión de Biden marcará un pun- to de inflexión en la política exterior de Estados Unidos hacia Rusia, y Vladimir Putin lo sabe. Entre otras cosas, aumentará la amenaza de san- ciones a Rusia por sus activi- dades en el mundo diseñadas para socavar la democracia o amenazar la estabilidad. Sin embargo, habrá otra diferen- cia fundamental, que ha reci- bido muy poca atención y que irónicamente ofrece alguna esperanza para el futuro. Biden restaurará el profesionalis- mo de la diplomacia, que ha estado muy ausente durante los años de Trump. Anthony Blinken, el nuevo Secretario de Estado, interactuará con su par ruso de manera directa y frecuente, por canales diplo- máticos normalizados. Esto podría conducir a avances en cuestiones que van des- de la renovación de acuerdos de control de armas nuclea- res hasta nuevos enfoques para la estabilidad en Medio Oriente", dijo Jeffrey Lantis, profesor de ciencia política del College of Wooster y autor de Foreign Policy Advocacy

Articles in this issue

Links on this page

Archives of this issue

view archives of El Nacional de Oklahoma - January 7th, 2021