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May 2010

Abasto Magazine - Guía indispensable para el empresario hispano con noticias de última hora, consejos y directorio empresarial

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seguro médico, por lo que permitirles seguir en el plan de sus padres hasta los 26 años es una opción importante. Los adultos jóvenes no podrían seguir en el plan de sus padres si tienen acceso a un plan de seguros por medio de su empleo. Pero podrían casarse y conservar la cobertura. Otras reformas que entran en vigor este año prohibirían a aseguradoras cancelar la póliza a personas que enfermen, negar cobertura a hijos con problemas médicos e imponer límites financieros a una póliza en su plazo de vida. Estos cambios distribuirán más los riesgos, pero también es probable que hagan aumentar las primas de seguro. El plan de Obama también contempla un importante programa para los más vulnerables: las personas sin seguro que no pueden obtener cobertura debido a problemas médicos serios. Esto brindaría una protección general hasta que entre en efecto la expansión de cobertura en 2014. En cuanto a los adultos mayores, el plan crearía ganadores y perdedores. Por el lado positivo, cierra gradualmente la temida brecha sin cobertura para medicamentos, mejora la atención preventiva y pone renovado énfasis en tratar de mantener en buena salud general a los adultos mayores que sufren enfermedades crónicas. Pero también recorta fondos para comprar planes de seguro privados que se ofrecen a través del programa Medicare Advantage. Cerca de una cuarta parte de los adultos mayores han contratado estos planes, que generalmente implican costos bajos que se pueden pagar del bolsillo. La brecha sin cobertura de medicamen- tos quedará totalmente cerrada en 2020. En ese punto los adultos mayores serán responsables del 25% del costo de sus medicamentos hasta que intervenga la cobertura de costos catastróficos del Medicare, que bajaría sus pagos al 5%. Lo que viene después La verdadera transformación del sistema de salud de Estados Unidos no se dará hasta 2014. Cuatro cambios fundamentales tendrán lugar simultáneamente. • Las aseguradoras estarán obligadas a aceptar a todos los solicitantes. Ya no podrán rechazar a personas en mal estado de salud, ni cobrarles más. • Los estados establecerán nuevos supermercados de seguros para las pequeñas empresas y personas que compren su propia cobertura, reuniendo los recursos para generar el poder de compra que actualmente tienen los trabajadores de gobierno. • Se exigirá a la mayoría de los estadounidenses portar un seguro médico, ya sea a través de su empleo, de un programa de gobierno o pagado por su cuenta. Los que se nieguen serán multados por el IRS. • Empezarán a fluir los créditos fiscales a las familias trabajadoras de clase media para pagar las primas de seguro, y el Medicaid será expandido para dar cobertura a más personas de bajos ingresos.Los hogares que tengan ingresos hasta cuatro veces por encima del nivel de pobreza —unos $88,000 para una familia de cuatro— tendrán derecho a recibir asistencia. Pero la ayuda más generosa —como la ayuda en pagos conjun- tos y deducibles— será para las personas de bajos a medianos ingresos. Al final, la mayoría de los estadounidenses en edad laboral y sus familias seguirán teniendo cobertura de seguro por parte de su empleo, como ocurre hoy. Pero el número de personas no aseguradas disminuirá en más de la mitad. Mayo 2010 - 17

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